Cómo Escribir a una Chica y Errores Al Ligar Por WhatsApp

Entrar en conversación fluida por WhatsApp con una chica a la que apenas conoces es tirar todo tu valor por el retrete.

Soy Rubén Lara y hoy te voy a enseñar a usar las redes sociales para tener el mayor éxito posible a la hora de proponer una primera o una segunda cita con esa chica que tanto te gusta.

Ey, guaperas. ¿A ver a quién no le ha pasado esto? Un día sales por ahí, a un pub, a una cafetería, a la piscina y conoces a una chica con la que saltan fuegos artificiales. Os lleváis bien a la perfección, todo fluye, es un auténtico match.

Cuando os despedís o intercambiáis el teléfono y muy posiblemente hayas hecho un cierre de beso loco y lleno de pasión y amor.

Vas para casa con una sonrisa de oreja a oreja, todo es maravilloso. Quizá hayas encontrado a la chica de tus sueños con la que va a pasar, quién sabe, toda la vida o un largo tiempo.

Al día siguiente le escribes, ella te contesta, todo fluye, pero notas algo diferente. A los dos días vuelves a escribirle y la nota aún más fría. Al tercer o cuarto día ya te deja en visto o tarda muchísimo en contestar.

Y si sigue insistiendo, posiblemente lo que pase es que te ganes el bloqueo.

Muchos de vosotros me preguntáis por qué es tan complicado llegar a la segunda cita. Realmente, el 90 % de las veces nos quedamos a las puertas de esa segunda cita y nunca llegamos a volver a ver a esa chica con la que nos hemos sentido tan bien.

¿Por qué es eso?

La herramienta de redes sociales, WhatsApp, Facebook, Instagram, Snapchat y todo eso derivado del infierno son realmente un arma de doble filo en esto de las relaciones sociales.

Supusieron una revolución en el arte del ligoteo. Claro, ahora puedes pretender a la chica que te gusta a cualquier hora del día, desde el sillón de tu casa, en pijama o en pelota.

Y lo que te da más fuerza, la seguridad que tienes al no tenerla delante, al no mirarle a los ojos cuando le dices lo mucho que te gusta.

Pero realmente eso es mucho más negativo que positivo, porque solo realizas la conversación, la comunicación, en un 20. %. El 80 % restante que viene de mirarla a los ojos, los gestos de tu cara, tu sonrisa, los gestos de tus manos, eso es imposible de transmitirlo por las redes sociales.

Entonces hay un alto porcentaje, extremadamente alto, de que tus palabras sean malinterpretadas.

Además, el macho alfa no es tan alfa las 24 h del día, o al menos no todos los días. Si tú entras en conversación fluida un día que no es el tuyo y intentas transmitirle algo de ti una idea ella es posible de que lo malinterprete o de que no lo entiendas, pero es que es normal, no te conoce, no sabe cómo lo dice.

Además, sabes que una vez que ellas te consideran como una pareja potencial, entran en juego inconscientemente. Por su parte, los aros psicológicos son como una especie de pruebas que ellas te ponen para ver si eres el hombre que ellas necesitan.

Hablaremos de lo de los aros psicológicos en otro vídeo.

Si tú no estás preparado, si tú hablas más de la cuenta, es muy sencillo, muy fácil caer en esas pruebas y con el resultado de que sea totalmente descalificado en la interacción.

Mi proposición y recomendación a la hora de usar las redes sociales es extremadamente sencilla. Nunca, nunca, nunca, nunca se entra en conversación fluida con una chica con la que no has tenido sexo.

Debes hacer tuyo el término de menos es más. Así que por WhatsApp no se escala, no se cualifica y algo que no debes hacer ni siquiera en persona, mucho menos por redes sociales, no se demuestra valor explícitamente.

Así que la única razón para abrir una conversación por WhatsApp ¿recuerdas que estuvimos hablando del por qué?

Tu por qué, es proponer cita. Y para proponer una cita no necesita una tarde de comerle la cabeza, ni cuatro o cinco horas de conversación sin sentido. Con cinco o 10 líneas es más que suficiente.

Proponer una cita por WhatsApp consiste en dos fases.

La primera es realizar la conexión emocional, que es simplemente llevarla a ella y a ti mismo al estado que teníais la última vez que hablasteis, os visteis. Y eso se consigue pues recordando una anécdota, un chiste o alguna situación que vivierais juntos y que os divirtiera.

Una vez en estado, tendrás muchísimas más posibilidades de que la cita que propongas sea aceptada.

Si acepta, acaba la conversación, no hay nada más que decir.

Si tienes futuras conversaciones, simplemente se usan para determinar la logística de la cita, es decir, a la hora que habéis quedado y el lugar.

Y si por alguna casualidad te cancela la cita sin ningún sentido, no le das una segunda oportunidad, se lo ha perdido.

De acuerdo #guaperas, esto ha sido todo en la sección de relaciones sociales esta semana.

Te recuerdo que tengo un taller online de Daygame, un taller totalmente personalizado one to one en el que hablaremos de esto y de mil y una cosas más durante un mes completo.

¿Te ha gustado el vídeo? ¿No te ha gustado algo? ¿No estás de acuerdo? ¿Quieres preguntarme algo? a los comentarios.

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Dale a la campanita y ya sabes, hasta pronto…

#guaperas.